medicina y estética

Los fines de la medicina estética son la restauración, el mantenimiento y la promoción de la estética, la belleza y la salud, para lo que utiliza prácticas médicas y de pequeño intervencionismo, en las que se emplea anestesia tópica o local y en régimen ambulatorio. Este tipo de intervenciones estéticas son realizadas por un personal médico cualificado. El objetivo principal que persiguen estas técnicas es ejercer una verdadera medicina preventiva, puesto que un aspecto estético adecuado siempre es beneficioso para el paciente y ayuda al bienestar y a una mejor salud general. La medicina estética nunca utiliza técnicas de cirugía mayor ni que requieran anestesia general, como sucede en el caso de la cirugía estética, que en la mayoría de sus actuaciones implica un ingreso hospitalario del paciente.

Esta área se combina con fisioterapia, combinando conocimientos propios de la fisioterapia dermatofuncional con fundamentos de bienestar estéticos, ofreciendo tratamientos especializados para mejorar la apariencia y elasticidad de la piel. A través técnicas manuales y de aparatología que nos permite:

En definitiva, podríamos decir que como objetivo general, esta especialidad busca restaurar la función de la piel, así como el resto de sistemas que contribuyen a ello, y mejorar la calidad de vida de los pacientes.